A partir de 2019 se producirá una reducción de la cuantía de las nuevas pensiones del 4% cada 10 años y de forma acumulativa. Supondrá que una pensión de jubilación de 1.000 euros mensuales, se quedará en960 euros en solo 10 años, y así sucesivamente. Es la denuncia que realiza UGT en función de laActualización de Programa de Estabilidad, y afirma que a eso hay que sumar «la pérdida de poder adquisitivo que sufrirán los pensionistas a tenor del Índice de Revalorización Anual de las Pensiones ideado por el Gobierno, para evitar que las pensiones se revaloricen conforme al IPC (el incremento de pensiones del 0,25% anual o como mucho del 0,5% quedará muy por debajo del coste de la vida), lo que producirá un grave y creciente empobrecimiento de los pensionistas a lo largo de su vida (conviene recordar que la pensión media se sitúa en 918 euros mensuales)
Para el sindicato, todo lo anterior hace que el gasto en pensiones apenas varíe en las próximas décadas, a pesar de que se prevé que el número de pensionistas aumente en más de 6 millones. En 2013, el gasto en pensiones fue del 11,8% del PIB; en 2050 será ligeramente superior (12,3%) y a partir de entonces y hasta 2060, volverá a descender al 11% del PIB, según las propias estimaciones del Gobierno.
«El Ejecutivo entiende que el tope máximo de gasto debe adecuarse a los ingresos por cotizaciones de la Seguridad Social (que se mantienen más o menos estables desde hace años en torno al 11% del PIB). Sólo le preocupa la dimensión financiera y la capacidad del sistema para autofinanciarse», añade.